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JUAN YÁÑEZ, vuestro humilde servidor, les da la bienvenida...

jueves, 18 de julio de 2019

Nisman y la Justicia Argentina





Juan Yáñez

                   Es costumbre que Argentina, como en otros países del orbe sobre la injerencia de la política en la justicia. Más aún, cuando la política que se practica en el país es de dudosa condición. No existe, a las claras la ideología propiamente dicha, sino una vaga mezcla de acomodo, de inmoralidad y de procurar hacerse rico con los dineros públicos. Todo ello no es nuevo y las excepciones no faltan; quizás venga desde los principios como nación, aunque lo inmediato y sin generalizar, lleva muchos años de mentira y canalla al mismo tiempo. Todo ello está ya comentado hasta el hartazgo y no es nuestra intención continuar con similar discurso. Pero sí, expresar nuestra protesta por la demora de la justicia en aclarar quién es el responsable de la muerte de Nisman.

 Toda la investigación realizada o lógica elemental, apunta hacia a la señora que pretende ser elegida para un nuevo mandato. Suponemos que hay que ser verdaderamente sinvergüenza para mostrar la cara y hablar de tantas pistoladas que hasta el “rey” de los cínicos quedaría como principiante. Resulta evidente que Cristina Kirchner, algunos miembros de su gabinete y otros cómplices necesarios que incluye a funcionarios de seguridad y espías internacionales al más puro estilo “James Bond” están implicados en una siniestra organización mafiosa.

 Estamos hablando sobre una venta ilegal de uranio desde Argentina hacia a Irán que resultara frustrado  También la CIA en sus investigaciones afirma con sobrada precisión de esta ilícita acción entre los países nombrados. Ambas investigaciones sustentan las pruebas para dar con los responsables del asesinato, tanto ideológico como material, del fiscal Nisman.


El nombrado fiscal era el responsable la investigación del violento atentado que sufriera AMIA y por sus investigaciones alega que  Cristina Kirchner estaba dispuesta a firmar el Memorandum de Entendimiento con Irán para que de esa manera lograra encubrir a los terroristas. Por esta causa, la ex presidente en aprietos por la acusación de Nisman  de quien trata de defenestrar su imagen pública y desvalorar la acusación antes de ser asesinado por un sicario. Eliminado Nisman no hubo continuación procesal y obviamente no se pudo ratificar o desestimar  su argumentación, su muerte selló su silencio.

Hoy día para aquellos que maquinaron este crimen se sienten seguros de su impunidad. Creen que ellos escriben su propio destino, ignorando que es la vida quien lo escribe. La ahora candidata a vicepresidente con su socio de formula quiere volver a mandar, a pesar de su ineficiencia política, la evidente malversación y vulgar robo a la nación.
CFK y toda su mafia repiten que  el fiscal se había suicidado cuando se convenció del error de presentar una grave denuncia de encubrimiento y traición a la patria. Solo repitieron el cuento chino del suicidio y acusaron al fiscal de demente paranoico.

Poco o nada se espera de la justicia argentina, quizás a la CIA les interese  encontrar a los responsables del frustrado tráfico ilegal de uranio entre Buenos Aires y Teherán.
Alguien conocedor del caso afirmó: "Había mucha gente interesada en que el fiscal no tuviera la posibilidad de hacer interrogatorios, allanamientos, indagatorias, detenciones. Nisman iba a sentar en el banquillo de los acusados a Cristina y toda la cúpula de los servicios de inteligencia argentino".

Todavía hay mucha tela por cortar…