El titular lo
publica La Verdad, en Maracaibo: “Ausentismo escolar por hambre. “Tuve que
lavar ropa ajena para poder darle dinero a mi hija para la merienda del
colegio. Nunca había hecho esto”. Contó la representante de una niña, Evelinda
Diaz, una mujer trabajadora. Completó que envía a sus hijos al colegio sin
comer porque sus ingresos no le alcanzan para comprar comida. “Este año fue
caótico”, se quejó la mujer. La escasez de alimentos ha hecho que la ausencia
de niños en los salones de clase sea recurrente. Los padres no quieren
enviarlos sin comer y otros los llevan al colegio sin haber probado bocado”.
Repito el titular: “Ausentismo escolar por hambre”.
Ahora le invito a
que haga un ejercicio de imaginación. Ilustre ese titular con la fotografía de
un personaje obeso, no solo en grasas mórbidas sino en pensamientos morbosos y
siniestros. El personaje responde al nombre de Herman Escarrá y se presenta
como abogado constitucionalista. Declara en Aporrea: “Yo lo que sí les puedo
decir es que los abogados bolivarianos están preparados en todos los estados y
las principales ciudades para presentar en cada estado y cada ciudad, no menos
de 1.000 amparos, lo que serían más de 10 mil amparos, además de los recursos
directos ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), entonces tendremos
revocatorio dentro de 20 años, si acaso, olvídense de eso. En el supuesto
negadísimo que pudiera suceder (el referendo), no se de qué manera, tienen que
responderle a más de 10 mil amparos constitucionales, recursos de inconstitucionalidad,
recursos en sedes administrativas y denuncias de naturaleza penal, entonces sí
nos vamos a dar duro, muy duro. Esos recursos están elaborados, por si acaso”.
Este señor, que
era tan pomposo y rebuscado en su lenguaje, se ha dejado contagiar por el
espíritu malandro y pendenciero del poder. Las malas mañas son las que se
pegan.
Este tipo de
contrastes nos da muestra de lo duro que se nos hace la vida en la Venezuela de
hoy. El contraste es entre ese el titular -“Ausentismo escolar por hambre”- y
la arbitrariedad impúdica y desvergonzada de este individuo que, seguramente
bien pagado, procede a boicotear lo que para todos, chavistas incluidos, es la
salida lógica, pacífica y constitucional a la crisis política que padecemos.
Otro ejemplo.
Correo del Orinoco, la Artillería del Pensamiento, gran titular en la primera
página de hoy: “Políticas públicas de Venezuela se ajustan a la Agenda ONU
2030. El vicepresidente para la Planificación y el Conocimiento, Ricardo
Menéndez, defendió los logros de la revolución bolivariana”. ¿Pero cuáles son
esos logros? Leo en El Estímulo.com: “El vicepresidente denunció (¡una vez
más!) una guerra económica contra Venezuela. Y rechazó las ofertas de ayuda
humanitaria que ha hecho Naciones Unidas. “Si se quiere ayudar a Venezuela la
solución es respetarnos. Es dejar que los venezolanos resolvamos los temas que
tenemos que resolver los venezolanos y que no haya interpretaciones maliciosas
desde el punto de vista de la economía de nuestro país.”
“Interpretaciones maliciosas”, ¡por favor!
Si hacemos caso
omiso de las fotografías de estos dos personajes –Escarrá y Menéndez-,
comprobaremos que ambos tienen el mismo tono desafiante, escurridizo y mendaz
en el discurso. Palabra más palabra menos, lo que dice el flaco es igual a lo
que antes dijo el gordo.
Leo en El
Estímulo.com: “Menendez cree que los indicadores que algunos tratan de sacar
sobre el país en el exterior son indicadores descontextualizados que no tienen
validez desde el punto de vista de los datos”.
Acentuando las
contradicciones e incoherencias gubernamentales, la respuesta a Menéndez bien
la podríamos tener en estas declaraciones de Juan Arias, Ministro para Las
Industrias Básicas, Estratégicas y Socialistas: “No hemos sido eficientes en
detener la inflación. El gobierno nacional ha cometido errores de política
económica”. Esto lo dijo Arias en una entrevista en Globovisión. “Es necesario
hacer una revisión a la medida del control de precios”. Y, hablando de
inflación, el Fondo Monetario Internacional estima que la de este año va a ser
superior a 700%.
Finalizo leyendo
este texto de Pedro Benitez en Konzapata.com: “El cierre fronterizo decretado
por el Gobierno hace 11 meses sólo ha servido para demostrar, más allá de
cualquier duda razonable, que el problema económico lo tenía Venezuela y no
Colombia. Hace casi un año en Venezuela las colas y el desabastecimiento eran
generalizados, pero no había hambre. Hoy hay hambre en Venezuela y somos el
único país del planeta al borde de una crisis humanitaria sin haber pasado por
una guerra. Estamos por entrar al macrabro club de la Cuba del período
especial, de la China de Mao y de la Rusia Soviética de los años treinta del
siglo pasado.”